La
dentición temporal es aquella que se denomina comúnmente
como “dientes de leche”, mientras que la dentición
permanente está formada por los dientes que permanecerán en nuestra boca la
mayor parte de nuestra vida y que si se caen no van a ser reemplazados de forma
natural por otros. Cuando conviven los dientes de leche con los definitivos se
le llama dentición mixta y es algo que ocurre aproximadamente entre los 6 y los
12 años.
A continuación repasaremos cuáles son las
principales diferencias entre la dentición temporal y la permanente. Además, te
recomendaremos el mejor escáner dental para estudiar la dentición, tanto en
niños como en adultos, por su baja exposición a los rayos X, su comodidad y su
altísima calidad.
Diferencias
entre dentición temporal y permanente
La diferencia más
notable entre la dentición temporal y la permanente está en el número de
dientes. En la dentición temporal hay 20 dientes divididos en 10 por cada una
de las arcadas. En cambio, en la dentición permanente se encuentran 16 dientes
en la arcada inferior y 16 en la superior, sumando un total de 32 dientes.
El tamaño de los
dientes también es una diferencia que se puede observar a simple vista.
Concretamente, los dientes de leche tienen una corona y una raíz más pequeñas.
La forma de la raíz de los “dientes de leche” es más bien arqueada, mientras
que los permanentes la tienen piramidal.
La dentición temporal
tiene un color más blanco que la permanente, que es más o menos amarilla
dependiendo de la higiene y de hábitos como fumar, tomar ciertos medicamentos o
abusar del café.
Los dientes definitivos
tienen unas capas de esmalte y dentina
más espesas que los dientes temporales, siendo así más resistentes al
desgaste
Finalmente cabe
destacar que la dentición temporal presenta espacios entre diente y diente, mientras que la dentición
permanente no debería presentar huecos. Además, el contorno cervical de los
dientes temporales es más plano que el de los fijos, que son más ondulados.
Para obtener imágenes
detalladas de los dientes, los tejidos blandos, los huesos y los nervios de la
boca es necesario realizar un escáner
dental. De esta forma se pueden diagnosticar problemas como una agenesia dental, es decir, la falta de
formación o desarrollo de uno o más dientes, que provocaría que algún diente de
leche tardara demasiado en caer o que no lo reemplazara ningún diente
permanente.
Para estudiar la boca
de los pacientes, especialmente la de los más pequeños, te recomendamos usar el
escáner dental Veraview X800 de Morita. La exploración es muy veloz y usa un
haz cónico, consiguiendo que la
exploración sea mínimamente invasiva.
También tiene en cuenta
la comodidad del paciente, ya que se
puede adaptar a cualquier altura, dispone de 3 arcos dentales distintos para
amoldarse al tipo de mandíbula y el apoyo de barbilla es regulable.
La calidad de la imagen es una de las más
altas del mercado, consiguiendo resultados totalmente nítidos con una
resolución de 2,5 LP/mm y un tamaño de vóxel de 80 μm. Una vez obtenidas las
imágenes se pueden editar y ampliar como se necesite
El ser humano presenta una dentición
al igual que la mayoría de los
mamíferos, lo que quiere decir que tenemos una dentición temporal o decidua,
que caduca y otra permanente, que sucede a la anterior. Esto es así, ya que
cada dentición se adapta concretamente a las diferentes etapas o patrones de
alimentación que se observan a lo largo de la vida de los mamíferos.
Además, de ser difiodontos,
el ser humano es una especie heterodonta, por lo que en cada dentición va haber
grupos de dientes diferentes, donde cada grupo va a tener una misión en la
masticación, los incisivos se encargan de cortar los alimentos, los caninos de
desgarrar, y premolares y molares de triturar la comida.
Detención
Temporal
La dentición temporal es
comúnmente conocida como “dientes de leche”. Se les denomina de esta forma por
su característico color blanco leche, a diferencia de la dentición permanente
que tiene un color más amarillento. Este característico color se debe a la
composición que presenta el esmalte de los dientes temporales, que contiene
mayor cantidad de contenido orgánico y bajo contenido de mineral por lo que el
esmalte tiene menor translucidez y se ve más blanco.
Los recién nacidos no
presentan dientes ya que su alimentación es puramente líquida y es a partir de
los 6 meses de edad cuando comienzan a erupción los primeros dientes de leche.
La dentición temporal está
formada por 20 dientes, 10 en la parte superior y 10 en la parte inferior y su
periodo de erupción es:
A
los 6 – 7 meses erupcionan los incisivos centrales
inferiores
A
los 7 – 8 meses erupcionan los incisivos centrales
superiores
A
los 9 – 10 meses erupcionan los incisivos laterales
superiores
A
los 10 – 12 meses erupcionan los incisivos laterales
inferiores
A
los 14 meses erupcionan los primeros molares inferiores y
superiores
A
los 18 – 20 meses los caninos inferiores y superiores
Y a los 24 meses termina la erupción
con los segundos molares inferiores y superiores.
La erupción dentaria puede
variar unos meses, de forma que aparezcan más precozmente o de forma tardía, lo
normal es que a los 3 años de vida el niño tenga todos los dientes temporales
en boca, independientemente del momento y el orden en que aparezcan.
¿Por
qué algunos bebés nacen con dientes?
En algunas ocasiones se
observan bebes recién nacidos con dientes, comúnmente los incisivos centrales
inferiores. Si están presentes en el momento del nacimiento se les denomina
dientes natales, pero si aparecen al mes del nacimiento, se les denominan
dientes neonatales. Estas son variaciones en el proceso de erupción que va a
depender de factores hereditarios, endocrinos y ambientales. El manejo de estos
dientes va a depender de diversos factores como el grado de movilidad, si
realiza o no una adecuada lactancia ya que hay ocasiones en la que provocan
dolor en el pecho de la madre, si son supernumerarios o forman parte de la
dentición normal.
Todos estos factores deben
valorarse tanto con el pediatra como con el odonto pediatra ya que si son
dientes que pertenecen a la dentición normal temporal deberán mantenerse en
boca debido a que estos dientes no se van a perder hasta los 5-6 años.
Funciones
de la dentición temporal
Masticación. La dentición
temporal aparece en el bebé debido a que a partir de ese momento pasa de la
alimentación puramente liquida a semisólida, hasta llegar a los 24 meses de
edad, donde ya su alimentación habrá pasado paulatinamente a sólida.
Como bien sabemos, la
digestión comienza en la boca, que es donde se produce la trituración de los
alimentos para la formación del bolo alimenticio. Este paso es crucial ya que
la formación de un bolo alimenticio correcto permitirá una buena digestión que
y el niño se desarrolle con total normalidad. Si el niño no mastica bien por
falta de dientes, malos hábitos o maloclusiones su crecimiento se verá afectado
de forma considerable dando lugar a una talla y peso inadecuados.
Muy importante tener en
cuenta percentiles de peso y talla por debajo de 50 ya que pueden esconder
algún tipo de patología, entre ellas en la cavidad oral.
Crecimiento y desarrollo del
maxilar y la mandíbula. El hecho de masticar estimula el crecimiento y
desarrollo de ambos maxilares “la función hace al órgano”, esto quiere decir que
si no hay masticación los huesos maxilares se atrofian provocando hipoplasias
de los maxilares. Todo esto se debe a que en los maxilares se insertan los
músculos de la masticación que estimulan el crecimiento longitudinal y
transversal de los maxilares.
Fonación. Otra de las
funciones fundamentales de la aparición de la dentición temporal es el habla.
En esta función, cabe destacar la importancia de los incisivos superiores
encargados de la pronunciación de la T, D, S, Z, C. Los niños que por motivos
de salud oral han perdido de forma prematura este grupo dentario aprenderán a
producir estos sonidos de forma anómala, por lo que la reposición de estos
dientes es fundamental junto con la ayuda de los logopedas.
Estética. Muchas veces pensamos que los niños
no son conscientes de la estética, pero cuando comienzan su etapa preescolar,
los niños empiezan a notar las repercusiones de la caries, sobre todo en el
sector anterior, ya que se ven los dientes con mal color lo que les ocasiona
una falta de autoestima, por ello es necesario restaurar su estética lo antes
posible.
Mantenimiento de espacio.
Los dientes de leche ocupan un espacio en las arcadas dentales, que junto con
el espacio que se origina del crecimiento, va a ser el lugar de alojamiento de
los dientes permanentes. La pérdida prematura de un diente de leche, mucho
antes de su periodo normal de exfoliación, va a provocar trastornos eruptivos
sobre el diente definitivo que le sucede. Por ello, siempre que se pierda un
diente de leche de forma prematura es necesario guardar el espacio que queda
con un mantenedor de espacio, con el fin de evitar apiñamientos y problemas en
la estabilidad oclusal del niño.
Salud
general. El principal problema por el que acuden los niños a la
consulta es la aparición de caries dental, la cual avanza rápidamente en la
dentición temporal, ya que presentan un esmalte menos calcificado que en
permanentes. Además, la cámara pulpar (nervio) es mucho más grande por lo que
es muy frecuente que las caries lleguen rápidamente a ella y ocasionen dolor.
La pulpa contiene todo el paquete vásculo-nervioso mediante el cual se conectan
los dientes con el resto del organismo pudiendo pasar el contenido bacteriano
de la caries al torrente sanguíneo, originando infecciones a distancia como la
endocarditis bacteriana.
En niños con cardiopatías
congénitas, problemas renales o patologías sistémicas graves es de suma
importancia el cuidado de su salud oral para evitar posibles complicaciones.
Dentición
mixta y permanente
A los 6 años de edad
comienza la primera fase de recambio la cual dura alrededor de dos años.
Comienza con la erupción de los primeros molares permanentes, normalmente
primero los inferiores (36 y 46) y después los superiores (16 y 26). A
continuación, se produce la caída de los incisivos temporales y la erupción de
los permanentes:
A los 7 años erupcionan los
incisivos centrales permanentes inferior y superior
A los 8 años erupcionan los
incisivos laterales permanentes inferior y superior
A continuación, se produce
un periodo de descanso que dura alrededor de un 1 año donde se produce el
recambio de los dientes restantes:
A los 9 años erupcionan el
canino permanente inferior y el primer premolar superior.
A los 10 años erupcionan el
primer premolar inferior y el segundo premolar superior
A los 11 años erupcionan el
segundo premolar inferior y el canino superior
A los 12 años erupcionan los
segundos molares permanentes inferior y superior.
Esta secuencia de erupción
puede variar, de forma que el canino superior erupciona a los 9 años y no a los
11. Este tipo de secuencia de erupción es la más favorable ya que permite que
el canino erupciona antes que los premolares por lo que habrá menor probabilidades
de desarrollar apiñamiento dental, pero no es la secuencia más común, por lo
que es necesario vigilar la erupción de los caninos superiores para evitar
futuros problemas de espacio.
Es a partir de los 12 años
cuando el niño va a poseer la dentición permanente, que se completará con la
erupción de los terceros molares o cordales. La edad de erupción de los
cordales puede variar, incluso existen casos en los que nunca llegan a erupción
porque se queden incluidos en el hueso o porque no lleguen a formarse
(agenesias).
Cuidados
de la dentición temporal y permanente
Es de suma importancia el
cuidado de la salud oral de los más pequeños, incluso antes de que aparezca el
primer diente, ya que cualquier infección originada en la boca del bebé puede
comprometer su salud general. Por ello, es importante que los padres se hagan
una revisión de su boca antes del nacimiento para evitar la aparición de caries
en dientes de leche.
Conforme vayan erupcionando
los temporales es necesario instruir a los padres sobre la higiene dental de su
hijo y que estos a su vez, inculquen unos buenos hábitos de higiene oral a sus
hijos, con el uso de cepillos dentales y pastas fluoradas con el fin de
prevenir la caries dental.
Además, los padres deben
observar a sus hijos, ya que hay niños que adquieren una serie de hábitos como
chuparse el dedo o morderse el labio o la lengua pueden originar futuras mal oclusiones,
que en dentición definitiva necesitarán un tratamiento ortodóncico.
También es recomendable el
uso de chupetes y tetinas anatómicas ya que la morfología de estas favorece el
correcto desarrollo de los maxilares y de la dentición.
Por último, decir que es
importante visitar periódicamente al Odontopediatra para que vaya controlando
el crecimiento de los maxilares y la erupción dentaria con el fin de prevenir
futuras maloclusiones o detectar ciertas patologías.